El Estadio Azteca, situado en la Ciudad de México, es un lugar que ha visto pasar la historia del fútbol frente a sus tribunas. Desde su inauguración en 1966, este estadio se ha convertido en un referente no solo para el fútbol mexicano, sino para el deporte a nivel global.
Un Escenario de Momentos Inolvidables
Hablar del Estadio Azteca es recordar dos de las Copas del Mundo más emblemáticas: las de 1970 y 1986. En 1970, Pelé y la selección brasileña levantaron su tercer trofeo mundial aquí, consolidando a Brasil como una potencia futbolística. Dieciséis años después, en 1986, Diego Maradona maravilló al mundo con actuaciones que aún se comentan, como el famoso «Gol del Siglo» contra Inglaterra.
El Corazón del Fútbol Mexicano
El Estadio Azteca es el hogar del Club América, uno de los equipos más importantes de México, y de la Selección Nacional. Aquí se han jugado finales de liga, partidos de clasificación y encuentros amistosos que han definido el rumbo del fútbol en el país. La atmósfera durante un partido importante es algo que todo aficionado debería experimentar al menos una vez.
Adaptándose a los Nuevos Tiempos
Con el paso de los años, el estadio ha sido renovado para mejorar la experiencia de los espectadores y cumplir con las exigencias modernas. Aunque su capacidad original se ha reducido, no ha perdido el carácter que lo define. De cara al Mundial de 2026, donde será nuevamente sede, el Azteca se prepara para recibir a aficionados de todo el mundo y seguir sumando capítulos a su ya rica historia.
El Estadio Azteca también ha albergado conciertos y eventos culturales de gran relevancia. Artistas internacionales han elegido este escenario por su magnitud y por la conexión especial que ofrece con el público mexicano. Sin embargo, es en el fútbol donde el Azteca encuentra su verdadera identidad.